Desafio ¡yo escribo! P5
febrero 19, 2014
"Hija de..."
La quinta parte del desafío "yo escribo" propuesto por Sparda, dedicado esta vez a los elementos recurrentes de nuestros textos, parece llegar en el momento justo; oportuna como pocas entradas, esta nos retrotrae a una previa, de la que hablaremos mas adelante, cuyo recuerdo me conmueve: habituado a que la gente lea este blog sin dejar comentarios tras sus pasos, hace bastante tiempo dedique una entrada a una persona que, supuse, jamas lo leería... pero lo hizo, y su comentario me impulsó a seguir escribiendo con cierta alegría, así como el juego que él mismo creó allá por el año 2000 me guió por el camino de la fantasía medieval.
Resulta que llevo 10 años manteniendo un elemento fundamental en todos mis escritos, y así como lo explique en "V de... malo maloso", intentare dar una breve explicación del mismo: detrás de prácticamente todos mis relatos, así como las partidas de rol que he escrito a lo largo del tiempo que llevo haciendo de narrador, la V ha sido sinónimo del mal.
Suelo reservar la aparición del gran villano para mas bien avanzada la historia, pero si bien esto no es algo constante, lo que si se mantiene es la terca obstinación de mi parte por llamar a todos mis villanos con nombres comenzados por V por el recuerdo de un personaje de videojuego... un jugador al que nunca conocí en persona, pero que supo hacerme la vida imposible durante mas de dos años de aventuras en el mundo de Argentum: Veronika. Una tontería que decidí mantener y que no deja de generar cierta nostalgia a la hora de escribir.
Mis jugadores y lectores habituales recordaran al malvado hechicero Valdemar, con su telaraña de conspiraciones por un mundo de creación propia sobre las reglas de D&D e inspirado en un personaje de Les Luthiers; o a Valfierno, un artista inmortal (e inmoral) corrompido por la sed de sangre en el mundo de tinieblas, basado en la verdadera historia de Eduardo Valfierno, el Marqués de Valfierno, estafador argentino del 1900.
Por supuesto, este detalle de mis historias suele ir de la mano de diversos artilugios para confundir, aunque nunca tardo demasiado en descubrir los planes malévolos del villano una vez este aparece en escena.
El segundo elemento que suele repetirse a lo largo de mis escritos es la aparición, mas o menos detallada, de los estados mentales de los protagonistas. Probablemente haga hincapié en esto por mis estudios en psicología, pero también podemos pensarlo desde el otro lado, y decir que me incline a estudiar esto a partir de la fascinación que habían creado en mi la lectura y posterior uso de los fenómenos psi en la literatura.
Ejemplo de esto es la historia de Lorelei, compartida con ustedes en el punto 4 de este desafío, y especialmente de Sebastien, portador de la maldición de la sangre malkavian (VtM), quien trastornara la mente de cada personaje en Anhelos.
El tercer punto se ha vuelto recurrente en el ultimo tiempo, y radica en dotar de cierta conciencia al mundo mismo en el que trascurre la historia: alguna parte del mundo se modifica a voluntad, siente lo que pasa en él y forma parte activa de los sucesos.
Aportando muchísima mas genialidad y llevándose todos mis elogios y reconocimiento, Edanna, de Lavondyss, ha creado un mundo maravilloso de conciencia y vida propia que me inspiró a colocar estos elementos en mis mundos, y cuya lectura recomiendo con fervor: Dyss Mitica.
Dyss es un ser vivo, un mundo consciente con capacidad de percepción y dotado de inteligencia. Un mundo que es capaz de alterar su morfología a voluntad. Se trata de un mundo consciente donde los sueños de sus criaturas conviven con los suyos forjando una extraña realidad.
Edanna (arroba) Lavondyss.net
Por ultimo, y en cierto modo parecido a lo que María J. Montiel, de "the dream to yggdrasil", nos cuenta en su respuesta a este punto, aparece la mención de los dragones... siempre los dragones. Criaturas que, coincido con la autora, albergan un significado que va más allá de lo bueno y lo malo, y que representan destrucción, magia, misterio y belleza, suelen aparecer en mis relatos mas bien en forma metafórica: no solo aparecen como criaturas en mis historias de fantasía medieval, sino también como símbolos y representaciones en mis historias mas actuales, oscuras y "realistas", caminando por la ciudad en forma humana o representados por grandes instituciones que albergan sus mismas características.
Y hasta aquí mis elementos recurrentes...
Posiblemente existan numerosos elementos más que hoy por hoy no logro ver, pero que algún que otro lector podrá señalar y compartir con ustedes.
Gracias por llegar hasta acá
Si volvieran los dragones...
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